A quién llamarías?

Ayer leía un pasaje del libro "caldo de pollo para el alma", es un libro interesante que trae mensajes muy emotivos que pueden ayudarte a mejorar tu autoestima o a encontrar alguna motivación para un cambio positivo, el pasaje es la descripción de un ejercicio que en sí mismo es duro y difícil de llevar a cabo, ponía una situación imaginaria en donde solo te queda una hora de vida, piénsalo, ¿a quién llamarías y porqué?, ahora ¿porqué no lo haces?.

Cuando vemos un plazo perentorio somos más propensos a la acción, parece que hasta culturalmente, el dejar todo para el último momento es parte de nuestra idiosincracia como mexicanos, cuando sabemos que tenemos que entregar un trabajo y ya estamos en el límite, tenemos una inyección de energía que nos impulsa a completar la tarea, a veces se consigue y a veces no, si estuviéramos al borde de la muerte probablemente intentaríamos concluir todo lo que tenemos pendiente.

Regresando a la pregunta, a veces a lo largo de nuestra vida vamos dejando pendientes con personas con quienes nos relacionamos, amigos, parientes cercanos o lejanos, compañeros de escuela, de trabajo y no resolvemos esos pendientes, yo creo que un buen número de personas a las que se les hace esa pregunta tratarían de solucionarlos, una llamada para pedir perdón o mejor aún para perdonar.

Cuanto tiempo pasa sin que demuestres a las personas lo mucho que significan para tí, cuánto las quieres y lo bien que te hacen sentir, a veces no lo hacemos con la frecuencia que debemos ni a nuestra pareja o a nuestros hijos.

No dejes pasar el tiempo, expresa tus sentimientos hacia las personas importantes para tí, no esperes a estar en tus últimos momentos para hacerlo, podría no darte tiempo. Abraza, besa, rie y disfruta a tus seres queridos, habla con ellos y diles que los amas con palabras y con hechos, nunca será suficiente.

Te aseguro que cada vez que lo digas, tendrás momentos felices acumulando tu cuenta emocional, las relaciones positivas son un elemento de la fórmula PERMA de la felicidad de la que hablamos recurrentemente en el blog, no pierdas esas oportunidades.

A veces las prisas a las que te sometes, no te dejan realizar esas sencillas tareas como despedirte con un beso y decir "te quiero" y no sabemos si regresaremos a decirlo, nunca te salgas de casa sin despedirte.

Las comunicaciones de hoy nos permite estar en contacto permanentemente, aprovechémosla, si mandas un mensaje chistoso, manda también expresiones cariñosas, son como dice el libro "caldo de pollo para el alma"

Te dejo la frase para la reflexión...

"No hay beso que no sea principio de despedida; incluso el de llegada."

George Bernard Shaw (1856-1950) Escritor irlandés.