martes, 28 de octubre de 2014

El crédito III

Ayer concluíamos que las tarjetas son peligrosas y si no sabes usarlas se convierten en un lastre para tu economía y tu historial crediticio, pero ya te equivocaste y estás atorado con una deuda de la tarjeta y no puedes pagar, ¿cómo salir del atolladero?

Para comenzar tienes que dejar de usar la tarjeta, uno de los errores más comunes es seguir gastando, pagas una pequeña parte, el dinero que usas para pagar lo necesitabas para tus necesidades del día a día, así que para cubrirlas vuelves a usar la tarjeta, sigues en el mismo berenjenal, así que lo primero es dejar de usar la tarjeta, para vencer la tentación, rómpela.

Ya que resolviste el tema urgente comencemos a arreglar lo importante, tienes que acercarte al banco y hablar con el ejecutivo para ver la manera de reestructurar la deuda, para esto debes hacer primero un análisis de tus ingresos y de tus gastos, esta etapa es difícil porque implica "apretar el cinturón", ahorrar en los gastos superfluos para obtener los recursos necesarios para pagar.

Debes hacer una lista de los gastos inevitables y necesarios, deben ser menos de lo que ganas porque si es más, estás en problemas, porque lo que necesitas es ganar más, pero asumamos que efectivamente es menos, el importe remanente deberá ser lo que tienes disponible para pagar la deuda, una vez que tienes determinada la cantidad, es el moemento de acercarte al banco.

Hay dos opciones, una de ellas es contratar un crédito a menor tasa y con pagos diferidos a meses, es una de las mejores formas, por ejemplo, supongamos que debes 20 mil pesos en la tarjeta, ganas 5 mil al mes y solamente te quedan disponibles 1.5 mil pesos mensuales. Si pagaras los intereses de la tarjeta, normalmente rondan entre el 40 y 60% anual, pagarías casi los mil pesos sin bajarle nada a la deuda. En cambio, si consigues el préstamo a un año, la tasa promedio está por el 20% anual, por lo que pagarías 2 mil pesos mensuales, un total de 24 mil pesos, de los cuales sólo 4 mil serían de interés. Aquí todavía hay un déficit de $500 pesos mensuales respectoa lo que tenemos disponible para pagar, por lo que tendrás que ampliar el plazo o pedir el préstamo incluyendo el interés para solventar el déficit.

La otra forma es conseguir un convenio por insolvencia, detener el cobro de intereses y comenzar a pagar de acuerdo a tus posibilidades, con la desventaja de que esta negociación impacta negativamente tu historial crediticio y la otra ayuda a crearlo.

Así que lo mejor que puedes hacer es cuidar tu crédito. Por hoy te dejo la frase...
"Al buen pagador no le duelen prendas."
Refrán






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