lunes, 19 de mayo de 2014

Meter las manos al fuego

Esta expresión suele usarse para hablar de la calidad moral o de un atributo importante de un tercero, "meto las manos al fuego por fulano o fulana", nos atrevemos a hacer esta aseveración pero tal vez la persona a quien avalamos no lo merezca, personalmente por el único que metería las manos al fuego es por mí, solamente soy responsable de mis propios actos y decisiones, de nadie más.

El tema de hoy se me ocurrió porque un cliente se disculpó conmigo por haber apoyado a un empleado de bajo rendimiento bajo el argumento de que a él le ayudaba, el pasado fin de semana, esta persona cometió una falta imperdonable que le costó su empleo, el cliente no tiene porque asumir una culpa por el comportamiento de la persona a quien apoyaba, fue él quien, con sus actos, provocó su propio despido.

Casualmente, en la semana hubo un caso de otro colaborador que cometió una serie de errores, su jefe inmediato pidió mi ayuda para corregirlo ya que como yo "lo había recomendado", fui muy claro diciendo que la persona es apto o no para el trabajo, cumple o no cumple con el perfil y con lo requerido por la Organización, el que lo hubiera conocido anteriormente no tenía por que influir en la decisión, ni en el trato, ni en el nivel de exigencia para el puesto.

Es común que otras personas endosen una responsabilidad por las personas que "recomendamos" y lo pongo entre comillas porque una recomendación no implica que debemos responder por ellos, cada quien es el responsable de sus actos y decisiones y debe asumir el alcance de sus consecuencias.

A veces nos sentimos nosotros responsables por ellos y muchas de las veces tenemos un estrés adicional por las personas de las que hicimos un comentario positivo y están fallando, como si no fuera suficiente con nuestros propios errores.

Las personas que tienen la responsabilidad de dirigir un equipo de trabajo asumen con frecuencia la responsabilidad por la falla de un miembro del equipo, eso es muy diferente, el líder tiene el compromiso moral de lograr un objetivo a través de la coordinación y de los esfuerzos complementarios del grupo, si un miembro falla, debe tener la manera de que el equipo completo proporcione el soporte y de manera solidaria apuntale al miembro que falla, pero no le resta ni asume la responsabilidad en su cumplimiento individual, una vez logrado el objetivo, retroalimenta y trabaja con el individuo en favor del equipo.

Un líder no debe meter las manos al fuego por nadie, pero debe mantener al grupo enfocado, comunicado, entrenado y motivado para cumplir, la suma de responsabilidades es responsabilidad del líder. El español es muy bonito ya que en la raíz de las palabras y como se derivan tienen su significado, así que responsabilidad es la cualidad del responsable, es quien da respuesta, quien responde por algo; la raíz de esta palabra viene del latín, el prefijo re que significa reiteración y el verbo spondere que significa prometer u ofrecer, es decir una promesa o un ofrecimiento reiterado de algo.

Un ofrecimiento reiterado es una promesa cumplida, así que solamente asume la responsabilidad de tus actos, pero deja que cada quien meta sus propias manos al fuego...

Te dejo la frase para la reflexión:
"Somos la memoria que tenemos y la responsabilidad que asumimos. Sin memoria no existimos y sin responsabilidad quizá no merezcamos existir."
 José Saramago (1922-2010) Escritor portugués.

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