Retomando el tema de ayer, la felicidad es una suma constante de momentos felices, si acumulas más serás feliz, personalmente trato de llenar mi vida de muchos de ellos, el escribir diariamente, esta media hora en la cual estoy frente a la computadora y que disfruto mucho me proporciona mi cuota diaria acumulable.
A ustedes ¿qué actividad les gusta?, dediquenle tiempo todos los días es una manera de ser feliz, su pasatiempo favorito cultivar plantas, cocinar, tejer, hacer figuras de cerámica, armar rompecabezas, escuchar música, lo que les gusta háganlo diariamente, las actividades diarias y las rutinas nos dan el pretexto perfecto para no hacer las cosas que nos gustan, así que encuentren el espacio en su día para hacerlo.
Ayer decía sobre el abrazar y besar a la persona amada, háganlo todo el tiempo, pero también tenemos muchas personas queridas que nos rodean y cada contacto que tenemos además de enriquecer una relación positiva, nos proporciona momentos de felicidad, así que siempre trata de llamar a un amigo para conversar, visitar a mamá o a papá, abrazar y besar a tus hijos, mandarle un mensajito por teléfono o en el face a tus amigos, salir con ellos, divertirte.
Hay momentos muy personales que también dan su cuota de felicidad, la oración, la meditación, el crecimiento espiritual, la lectura, reflexionar sobre tu desarrollo y mejora personal, ser mejor hijo, mejor padre, mejor esposo, mejor hermano, mejor cristiano, sentir la paz y la tranquilidad de estar en la Iglesia, sentir la cercanía de Dios en tu corazón.
Placeres más mundanos y que debes disfrutar con moderación, comer y beber lo que te gusta, un platillo favorito, un postre que te transporta en tiempo y espacio a tu infancia, descubrir nuevos sabores, una fruta con chilito y limón, un helado, una trufa de chocolate, disfrutar una copa de vino, disfrutarla con un pan con queso, tomar un café intenso, una cerveza artesanal, un tequilita, un mezcal con sal de gusano, compartir la mesa con la familia con amigos, conversar hacer sobremesa, reír.
Salir a pasear, caminar al atardecer en un parque, recibir la brisa fresca de la mañana, llevar a pasear a tu perro, dejar que se acueste a tus pies, ver la alegría con la que te recibe al llegar como si te hubieras ido hace mucho tiempo.
Hay tantos momentos felices, pueden ser muy breves pero la suma de ellos hace la diferencia, los seres humanos preferimos poner más atención a las preocupaciones, a la angustia, a la tristeza, le damos más peso y tendemos a recordar más lo negativo que lo positivo, rompe esa inercia y disfruta tu vida a través de estos momentos, piénsalo y haz tu balance, seguramente eres feliz y no te has dado cuenta que lo eres.
Como siempre te dejo la frase para la reflexión...
"Buscamos la felicidad, pero sin saber dónde, como los borrachos buscan su casa, sabiendo que tienen una."
Voltaire (1694-1778) Filósofo y escritor francés.